Av. Bs.As. y Playa
narración: Nora Ruiz
Nos encontramos en Av Buenos Aires y Playa. Esta emblemática construcción de los años 50 es el Centro Cultural Pipach, edificio declarado Patrimonio Histórico Cultural por el H.C.D. en agosto del año 2002. Fue diseñado por el Arq. Tomás Semsey. Un edificio con una línea arquitectónica diferente, con mucho espacio vidriado y que antiguamente poseía su techo también de vidrio, con una espectacular terraza mirando al mar, haciendo del lugar algo por demás distinguido. El Pipach fue un emprendimiento comercial de exiliados nobles húngaros que llegaron a esta ciudad en 1950. Abrió sus puertas al público un 6 de enero de 1953, como elegante casa de té, atendida por sus dueños, se trataba de la princesa María Windisch Graetz y el conde Itzvan Károlyi. La palabra “Pipach” significa amapola, esta inicial casa de té sumaria con los años un hotel con trece habitaciones y la condición de boliche bailable. Algunos memoriosos recuerdan con nostalgia “yo estuve alguna vez en una habitación del Pipach, acá, frente al mar”. Por el magnetismo de sus dueños pertenecientes a la nobleza, se dice que venían diplomáticos y extranjeros en coches importados como Volvos y Mercedes Benz. Las anécdotas recuerdan al Pipach como un sofisticado hotel con atención y comida exquisita, lugar de buen gusto para la charla y eventos varios, frente a la incomparable presencia del mar. Y hoy como Centro Cultural, se llevan a cabo tertulias, presentaciones de libros, muestras plásticas, talleres diversos, toda una serie de actividades tanto en verano como en invierno. En el Pipach, la cultura, “es algo que puedes respirar”.